Es una antigua tradición española llevar huevos a Santa Clara para pedirle que haga buen tiempo el día de la boda. Una boda pasada por agua supone que la novia llorará mucho a lo largo de todo su matrimonio. Por lo tanto, los días lluviosos son malaventurados para casarse. Sin embargo, la sabiduría popular intenta compensar lo que el destino nos niega y por eso el refranero insiste en todo lo contrario: "Novia mojada, novia afortunada". No se consuela el que no quiere.Santa Clara, que vivió en el siglo XIII en Asís, es la patrona de los fareros, los pescadores y de los navegantes. Mas recientemente, Pío XII la hizo también patrona de la televisión. Santa Clara no es, en realidad, patrona del buen tiempo, sino protectora de la paz en el matrimonio, pero se ha asociado su nombre al «tiempo claro».
Gracias Ester y Magdalena por vuestra colaboración en este asunto. Tener por seguro que si se cumple el rito no seré yo la única que os lo agradezca.

"Santa Clarita que no le llueva a mi amiguita"